agosto 23, 2009

Naturaleza del caballo

Los caballos son animales salvajes por naturaleza. Con la evolución del hombre, nos hemos encargado de domesticarlo y aunque éstos han respondido satisfactoriamente a nuestros estímulos no debemos olvidar sus predisposiciones naturales, ya que conocerlas nos ayudará a establecer estrechas relaciones con estos seres fieles y respetuosos.

¿Hogareño?
El caballo se caracteriza por ser hogareño. No le agrada mucho el cambio, pero cuando éste sucede se adapta fácilmente.
Estos animales poseen pues una gran capacidad de adaptación y tienen tendencia a establecer costumbres y a ser rutinarios, características que el hombre ha sabido utilizar a su favor.

Formas de aprendizaje
Los equinos, así como tienen capacidad de adaptación tienen aptitud para reaccionar ante demandas forzadas y una memoria majestuosa.
Estas predisposiciones naturales han generado formas de aprendizaje, la más sencilla que podemos aplicar es la de habituación.
La habituación se produce al repetir una acción, con un inicio inesperado, sin que a éste le siga efecto alguno, ni positivo ni negativo. Los caballos de desfile son un claro ejemplo de esta forma de aprendizaje. Éstos oyen repetidamente ciertos sonidos, sin que les siga ningún efecto, y así el animal ya no se asusta.

Otra forma de aprendizaje muy utilizada es la de “ensayo y error”. La cual se basa en la recompensa o castigo (refuerzo negativo o positivo) de una acción.
La tercera forma de aprendizaje es el condicionamiento clásico (Pavlov), en el que se busca que el caballo avance a un acontecimiento provocándole una reacción a otro acontecimiento, al principio sin significado, pero luego de varias repeticiones éste último toma valor de señal desencadenando una señal.

Es común que nos sorprenda ver que nuestros ejemplares se impacienten por comer al oír nuestra voz o la de su cuidador, sin siquiera haber visto la comida, esto sucede porque la voz se ha convertido en una señal.

Inteligencia equina
Es difícil medir la inteligencia de un caballo, pues al igual que los demás animales su inteligencia está relacionada con los problemas que debe resolver. Por lo tanto no podríamos hablar de una escala de inteligencia, sino que para cada una de sus aptitudes algunos ejemplares están más dotados que otros.

Bibliografía
Enciclopedia Larousse del Caballo. Primera edición. Ediciones Larousse S.A. Dinamarca núm 81. México 06600 D.F.

Acercamiento al caballo


Hay quienes creen que montar un caballo es ejercer fuerza sobre éste, esclavizarlo o sentirse superior a él. Quienes lo hacen están completamente equivocados y podría decirse que no los aman, pues cualquier contacto con caballos se basa en el respeto, la confianza, el bienestar del ejemplar y el amor por éste.

Acercarse a un caballo es, para mí, uno de los momentos más determinantes a la hora de establecer una relación con un equino, pues este es el primer contacto con el animal y por ende debe generar confianza, ser segura, amigable y siempre respetuosa.
Para acercarnos a un caballo, en donde quiera que esté, debemos prevenirlos de nuestra llegada, hablándole tranquilamente para que sepa que los vamos a buscar.

El acercamiento lo debemos hacer con calma, sin movimientos bruscos ni gritos, siempre presentándonos de cara, NUNCA por detrás de él.
Instintivamente el caballo huye, es por esto que debemos buscar atraer su atención y no hacerle sentir que lo perseguimos, pues esto hará que huya.

Ofrecerle un cubo de azúcar, una zanahoria, puede ser una buena manera de comenzar el contacto, después puedes proseguir con caricias en el cuello y en los hombres, que es donde más disfrutan, e inmediatamente sujetarle la crin para inmovilizarlo.

Enciclopedia Larousse del Caballo. Primera edición. Ediciones Larousse S.A. Dinamarca núm 81. México 06600 D.F.

¿Cómo hacer para que el caballo obedezca?

Como lo he mencionando hay quienes consideran que montar un caballo es cuestión de fuerza o de imponer superioridad. Quienes lo hacen están completamente equivocados y aún no entienden la esencia del mundo ecuestre, una esencia que busca crear un binomio equino-jinete, en el cual prime el respeto hacia el caballo.
Pero ¿qué jinete no ha tenido un momento de desespero por que su caballo no responde a los estímulos?

Existen muchas ayudas para lograr que éste responda; sin embargo, éstas son inútiles si como jinetes llegamos desesperarnos y comenzamos a utilizar la fuerza bruta y la agresividad como herramientas. Estas actitudes lo único que logran es empeorar la situación y poner la montura en una defensiva mayor, inclusive puede llegar a ser peligroso.
Una de las principales defensas por parte del caballo se encuentra en el plano de la mano dura. Éste reacciona de varias maneras:

1. Levanta la cabeza y gira el cuello (defensa hacia arriba). Lo primero que debes hacer para que el equino responda y no se oponga es suavizar la mano, buscando flexibilidad en los hombros y en los dedos y manteniendo la presión (contacto) en las piernas.

2. Se encapota (defensa hacia el pecho). El equino siente miedo hacia la mano del jinete, es por eso que debes volver a generar confianza suavizando la mano y retomando un contacto ligero utilizando las piernas.

3. Aleja las riendas del jinete extendiendo el cuello hacia abajo (defensa hacia abajo). En este momento entre más tires de las riendas más se resistirá el caballo tirando hacia abajo, y como él tiene mucha más fuerza que tú, tu esfuerzo será en vano. Por lo tanto se deben hacer medias paradas y actuar alternando una mano y la otra. Una vez el caballo responda, debes devolverle un contacto ligero, para que éste se sienta recompensado.
Otra defensa del caballo es no obedecer a las piernas del jinete. Es importante recordar que ésta no es una obediencia natural del caballo, sino que se logra con la educación y el aprendizaje de éste.
Cuando llegan estos momentos en los que el caballo se rehúsa a obedecer al trabajo con las piernas, podemos recurrir a las llamadas ayudas artificiales: la fusta y las espuelas.

La fusta SIEMPRE debe llevarse con la punta hacia abajo y a lo largo del cuello del caballo. Para utilizarla sólo debes darle un pequeño golpe sobre el hombro del caballo, sin soltar la rienda. Si ante este estímulo no responde, no hay que ensañarse a darle golpes y golpes con las piernas, lo que debes hacer es tomar las riendas con una mano y la fusta con la otra y darle con ésta un golpe seco, mas no violento, detrás de la pierna del equino, una vez responda debes acariciarlo para recompensarlo.

Las espuelas requieren de una experiencia mayor para utilizarse. Cuando el jinete la adquiere lo que se debe hacer es dirigir la punta de la espuela hacia abajo, girando ligeramente el tobillo. Una vez el animal responda no debes olvidar cesar la acción.
Estas son entonces unas ayudas eficaces para hacerse obedecer por la montura, pero lo que jamás debes olvidar es que no puedes abusar y mucho menos depender de ellas, siempre debes mantener un buen contacto de piernas y mano y utilizarlas cuando sea estrictamente necesario, pues una buena monta se fundamenta en un buen contacto, no en la dependencia de ayudas artificiales y mucho menos en el uso de la fuerza.

Bibliografía
Enciclopedia Larousse del Caballo. Primera edición. Ediciones Larousse S.A. Dinamarca núm 81. México 06600 D.F.

Enduro

El enduro es un deporte que en Colombia ha tenido un leve desarrollo, pero que en otros países, como Chile y Argentina, es considerado disciplina hípica de sus federaciones ecuestres.

¿En qué consiste?
El enduro ecuestre es una prueba de resistencia, que consiste en recorrer largas distancias, con una topografía muy variada, las cuales oscilan entre los 100 y los 160 kilómetros, en un mismo día, y en el que la salud del equino prima sobre cualquier cosa.

En estas pruebas no gana el más rápido ni mucho menos el más fuerte, pues cada prueba es independiente y completamente diferente la una de la otra. Aquí lo verdaderamente importante es la relación que el jinete logra crear con su caballo, convirtiéndose esta relación, o binomio, en el pilar de este deporte.

Control veterinario
Es esencial en las competencias de enduro. Cada determinada distancia se encuentran puestos veterinarios en los que se evalúa el estado del caballo y en los que se da la autorización, por parte de los veterinarios, para que éste continúe en la competencia.

¿Cuáles ejemplares pueden participar?
Es difícil dar una respuesta concreta. Pues en esta disciplina cualquier caballo, en condiciones normales de salud y con un buen preparamiento físico, puede practicar endurance.
Las opiniones difieren mucho y hay quienes consideran que un caballo de marcha es el más recomendado, o uno de mezcla árabe, o un francés procedente de purasangre; sin embargo, los resultados de las pruebas, en general, han demostrado que los caballos castrados son los más recomendados.

Entrenamiento
Entrenar un caballo para estas pruebas no es nada fácil. Debemos trabajar los músculos de manera útil y esto toma tiempo, pues sólo la práctica en la silla logra que la musculatura del ejemplar sea resistente e insensible al cansancio. Es importante realizar salidas de largas horas con el caballo y acostumbrarle a llevar la silla un tiempo mayor a lo estimado en la prueba.

Antes de comenzar la prueba…
El jinete debe ser consciente del binomio que es con su ejemplar, de la responsabilidad que esto le ataña y que la salud del caballo prima sobre todas las cosas. Así pues debe estar dispuesto a dar lo mejor de sí mismo y del caballo, pero sin sobrepasar JAMÁS sus capacidades, con el objetivo de llevarlo a la meta en un estado que le permitiera dar todavía más.

Para conocer más sobre este fascinante deporte puedes hacer click en la siguiente dirección: http://enduroecuestre.cl/content/view/5/28/ o visitar las página de la Federación Ecuestre Argentina o la de la Federación Ecuestre de Chile

Hipoterapia

Los caballos son seres maravillosos por esencia. Con la evolución de la relación caballo-hombre, el ser humano ha ido reconociendo las virtudes que estos animales tienen y el caballo se ha convertido en un importante auxiliar terapéutico.
Así pues que es en el caballo en lo que se fundamenta la hipoterapia. Esta técnica de rehabilitación, utiliza el movimiento del paso del caballo como medio terapéutico dirigido a personas que presenten alguna minusvalía física, psíquica o con problemas de conducta o inserción social.

La hipoterapia está dirigida a las personas que tienen algún problema físico que debe ser tratado por un fisioterapeuta, puesto que los jinetes no pueden ejercer un control del caballo.
Pero es que la hipoterapia no es la única disciplina ecuestre que ofrece estos beneficios terapéuticos sobre los pacientes.

Existen otras disciplinas, como el volteo terapéutico, la equitación terapéutica y la equitación adaptada, que también están dirigidas a pacientes que posean alguna discapacidad física o mental. Debemos recordar que cada una de estas terapias están dirigidas a determinados pacientes con determinadas características.

La hipoterapia en Colombia
Con el desarrollo de la hipoterapia y el de las demás terapias dirigidas, en el mundo, nuestro país ha ido acogiendo paulatinamente estos métodos y a su vez ha ido abriendo centros terapéuticos en los que los caballos, con su nobleza, paciencia y mansedumbre han logrado rehabilitar pacientes con serias patologías de carácter motor, sensorial, cognitivo y emocional.
En Colombia ya existen centros especializados en el tema, y al parecer esta es una práctica que irá tomando mucha más fuerza con el paso de los años, pues sus resultados sí lo demuestran.

Algunos de los centros a los que podemos recurrir son: